La primera entrevista en un proceso de selección es totalmente determinante, es como la primera cita, es aquella primera impresión en la que una frase mal expresada o un pequeño error puede costarte perder el empleo de tus sueños.

Sabemos (sobre todo si eres recién egresado) que es difícil mantenerse alerta de los puntos claves en una entrevista, y es que, mantener los nervios a raya cuando estás realmente interesado en un empleo o porque de plano lo necesitas, puede provocar un nivel de ansiedad que te lleve a no pensar bien las cosas o actuar de una manera que no es fiel a tu forma de ser, por ello queremos contarte cómo puedes evitar el “nosotros te llamamos en una entrevista”

Evitar comentarios y preguntas que denoten bajo compromiso

Hoy en día las empresas no están preocupadas únicamente por tus competencias técnicas y conocimientos, un punto clave es el nivel de compromiso que puedes demostrar como trabajador y si tú desde la primer entrevista realizas un comentario o pregunta que sugiera aunque sea solo un poco que no estás dispuesto a comprometerte con el puesto y la empresa serás recompensado con un “Nos comunicamos contigo”.

Preguntas cómo ¿Y cuándo son las vacaciones? ¿Y qué pasa si llego tarde a la evaluación? ¿Salen siempre a las 6?, pueden generar duda en el reclutador, porque aún nos has entrado y ya estás pensando en poner distancia entre el trabajo y tú y aunque no queremos que te esclavices en la oficina, a veces tendrás que quedarte un poco más tarde, también es evidente que es de mala educación tan siquiera mencionar que puedas llegar tarde. Es muy importante que tus competencias personales sean demostradas en entrevistas, hablar de tu proactividad, empuje e iniciativa te ayudará considerablemente.

Omitir malos comentarios sobre tu ex jefe o compañeros.

Puede que tu último trabajo haya sido realmente un fiasco, pero lo mejor sería que cuides la forma en como te expresas de las situaciones, compañeros y ex jefes. Si tuviste algún problema lo mejor es hablar con la verdad pero exponiendo únicamente como se dieron las circunstancias, evitando juicios y críticas que pudieran hacer pensar al reclutador que eres una persona conflictiva.

Ser honesto

Cuando estás participando en un proceso de reclutamiento y selección, no será raro que te investiguen e incluso apliquen estudios socio económicos y pruebas psicométricas que demostrarán mucho de lo que eres, incluso más de lo que tú pudieras describirte, por ello es importante que seas honesto, pues si ocultas un empleo porque no saliste en buenos términos o duraste muy poco, puede que lo encuentren como trabajo oculto y aunque de inicio pudieras no ser una razón por la que te descartarían, al mentir se convierte en una agravante por la que el reclutador te haría acreedor a un “nosotros te llamamos”

Acudir mal vestido o desaliñado

Este aspecto no es importante sólo en lo que imagen se refiere sino denota la importancia que le estás dando a tu entrevista y las ganas que tienes de conseguir el empleo. No es que te aconsejemos comprar los atuendos más caros del mercado, sino que pongas atención en que dirá de ti tu vestimenta y arreglo personal. Recuerda que la vestimenta debe ser casual y el arreglo personal debe ser sencillo pero impecable, puede que no sea la mejor producción, pero sí que haya higiene y planeación sobre lo que usarás al momento de acudir a la entrevista.

Deja la mala actitud en casa

Si hay algo que los reclutadores y las empresas en general realmente tomen en cuenta es la actitud y es que eso determina como reaccionaras y resolverás las dificultades que se presenten en el trabajo. Así es que si tuviste algún contratiempo durante el camino hacia la entrevista, evita cargar con una mala actitud, pues algún gesto de hartazgo o incluso cansancio podría mal entenderse y hacer que quedes fuera del proceso de selección. Lo mejor es tener una linda sonrisa a la mano, confiar y ser honesto acerca de tus habilidades y competencias.

Ya lo viste, en realidad los puntos son muy sencillos y no implican un gran esfuerzo. Lo único que tienes que hacer es relajarte, prepararte y contar con la mejor actitud y disposición en tu entrevista para resultar ser contratado.